El pronunciamiento de Nelson Merentes, presidente del Banco Central de Venezuela (BCV) sobre el caso Econoinvest solucionaría la disyuntiva que hay en el juicio oral y público sobre la legalidad de los Títulos de Interés y Capital y Cubierto (Ticc).
Mientras la Fiscalía insiste en que con estos papeles no se podían realizar operaciones permuta con fines cambiarios, la defensa de los cuatro directivos de Econoinvest detenidos sostiene que existía en el país todo un conglomerado de leyes y convenios que amparaban las transacciones con estos papeles.
"Que si hubo o no afectación financiera, que si era una operación 022 ó 023, aquí ya no se está discutiendo eso", indicó Hermán Sifontes en su derecho de palabra, el pasado martes, en la última sesión del juicio oral y público que se realiza en el Tribunal Quinto de Juicio desde junio de este año.
Una de las tres abogadas defensoras, Beatriz di Totto, le ha mostrado al Ministerio Público y al juez a cargo, Rodolfo Romero, que las operaciones hechas con los Ticc estaban amparadas no solamente por la Ley contra Ilícitos Cambiarios, sino por todo un régimen establecido desde el Convenio Cambiario N°4 y, además, reiterado por las diversas resoluciones del BCV.
Para Sifontes, una petición por parte del juez Romero para que el presidente del BVC se pronuncie con respecto a las operaciones permuta, sería suficiente para resolver todo el caso. "Cada una de las operaciones hechas está registrada en el BCV, cómo vamos a decir ahora que era ilegal. El Banco Central veía cuánto se ofertaba y cuánto se vendía. Ahora, con el innombrable (dólar paralelo) no se puede hacer eso", insistió Sifontes en su derecho a la palabra.
Política cambiaria de Estado
En efecto, la defensa ha insistido en que las operaciones permuta no solo estaban amparadas en la excepción del artículo nueve de la Ley de Ilícitos Cambiarios, sino también estaban supervisadas y registradas por el ente emisor, por una política cambiaria de Estado, instituida por ese organismo a través de su rango constitucional.
Los abogados insisten en que las transacciones efectuadas por Econoinvest en el mercado abierto alternativo no afectaban las reservas internacionales, sino que bajaban la presión de demanda de divisas ante Cadivi.
"Si nos declaran culpables entonces todo el país cometió un delito. Todo el mundo transaba operaciones con estos títulos, y todo el país sabe que era legal", afirmó Sifontes en su presentación al juez Romero y a la Fiscalía.
"Las consecuencias económicas de la eliminación del mercado permuta las estamos viviendo hoy. No se trata de nosotros cuatro, se trata del país. El sistema cambiario está a punto de colapso, las reservas internacionales están cayendo y las importaciones aumentan", agregó Sifontes.
"La amputación que se hizo al eliminar el mercado de valores restó una manera de ahorro y, con eso, se empujó a la gente a consumir más, porque no tienen cómo ahorrar", agregó.
La presentación de Hermán Sifontes continuará hoy, y será interrogado por los representantes del Ministerio Público, por los abogados defensores y por el juez, si lo cree necesario.
Educación financiera
Ernesto Rangel, otro de los cuatro directivos detenidos, también hizo su presentación en la última sesión del juicio oral y público y tuvo su derecho de palabra. Fue interrogado por la Fiscalía y también por el juez Romero.
Su presentación se basó en explicar el área que dirigía, la cual era Gestión de Patrimonio. Explicó que se trataba de portafolios de títulos valores diversificados, con rendimientos a largo plazo y por encima de la inflación. Orientados, sobre todo, a inversionistas que buscaran planes de retiros o inversión de fondos para asegurar la educación de los hijos.
"La gente asociaba el mercado de valores con grandes montos, y no necesariamente era así", indicó Rangel. "Nosotros educábamos a las personas y le mostrábamos que era posible invertir en este mercado con montos accesibles", señaló.
Hizo hincapié en que Econoinvest ponía énfasis en la educación financiera en el país, organizando charlas, talleres y foros. "Primero les enseñábamos a estudiar sus propias finanzas, a realizar su presupuesto familiar. Al final, el cliente podía tomar su propia decisión, con base en el conocimiento que ya tenía", agregó.
Sin embargo, ante las preguntas de la Fiscalía, Rangel explicó que Econoinvest tenía una variedad de clientes: mientras muchos necesitaban educación financiera, otros sabían de antemano qué producto buscaban en la empresa. Reiteró que como casa de bolsa eran intermediarios de títulos valores.
El Mundo, 21/11/2012, 19, Carjuan Cruz